¿Quieres aprovechar el verano para hacer prácticas de FP? En Dime si se puede te contamos todo lo que necesitas saber. Las prácticas de Formación Profesional son una oportunidad fundamental para ganar experiencia laboral, y ¿por qué no hacerlo en la época estival? En este artículo te explicamos los requisitos y ventajas de hacer prácticas de FP en verano, así como formas de encontrarlas y consejos para destacar en ellas. ¡Sigue leyendo y prepárate para impulsar tu carrera profesional!
¿Qué son las prácticas de FP?
Las prácticas de Formación Profesional (FP) son una modalidad de enseñanza que complementa la formación teórica que se adquiere en el aula, ofreciendo al alumnado la oportunidad de aplicar los conocimientos adquiridos en empresas, instituciones y fundaciones que cumplan los requisitos establecidos en la normativa vigente. Las prácticas de FP tienen como objetivo fomentar el aprendizaje activo y se establecen unos objetivos que el estudiante deberá alcanzar a lo largo de la práctica, contando con la tutela personalizada del profesorado asignado. Las prácticas de FP son obligatorias y, además, su calificación se incluye en la nota final del curso. En cuanto a los requisitos que se necesitan para realizar las prácticas de FP en verano, es importante destacar que, aunque el período de prácticas externas no podrá superar el 10% del total de la duración del plan de estudios como establece la Ley Orgánica de Universidades, el Reglamento de Prácticas Externas de la Universidad de Sevilla permite que este período pueda superar el 15% si está justificado.
Requisitos para hacer las prácticas de FP en verano
Si bien después de finalizar el curso, se dispone de un plazo de 3 meses para realizar las prácticas de FP, es posible hacerlas en cualquier momento durante ese plazo, siempre y cuando se hayan terminado antes de que acabe el año académico. Para empezar a hacer las prácticas de FP en verano, es necesario que el alumnado cuente con el certificado de notas en secretaría. Este período es especialmente interesante para los estudiantes, ya que es durante el verano cuando tienen menos clases y pueden dedicar más tiempo a las prácticas. No obstante, se debe tener en cuenta que la duración de las prácticas se encuentra regulada por la normativa de Formación en Centros de Trabajo (FCT), que establece que deben realizarse durante dos períodos del curso escolar, de septiembre a diciembre y de marzo a junio.
Como novedad, debido a la pandemia del COVID-19, se ha flexibilizado la normativa y se contempla por primera vez que las prácticas de verano en empresas puedan realizarse en el mes de agosto si existe consenso entre el alumno y el tutor correspondiente. La duración de las prácticas es de 400 horas, determinadas en un calendario consensuado entre la empresa y los tutores del centro educativo. La flexibilización de los requisitos de las prácticas de verano en empresas se extiende también al horario de las mismas, que pueden extenderse desde las 6 de la mañana hasta las 10 de la noche, adaptándose a los horarios de trabajo de los centros laborales. Cada centro de formación profesional tiene la responsabilidad de adecuar tanto las acciones formativas como las prácticas de FP al modelo más adecuado para cada alumno.
Ventajas de hacer prácticas de FP en verano
En el período de verano, los estudiantes tienen menos clases en la mayoría de los planes de estudios, por lo que pueden aprovechar este tiempo libre para realizar prácticas de Formación Profesional en empresas. Aunque, según la Ley Orgánica de Universidades, el período de prácticas externas no puede superar el 10% del total de la duración del plan de estudios, el Reglamento de Prácticas Externas de la Universidad de Sevilla permite que este período pueda superar el 15% si está justificado.
Además, la realización de prácticas en verano puede permitir a los estudiantes adquirir una mayor experiencia laboral y mejorar sus habilidades, ya que en este período las empresas suelen estar menos ocupadas y los estudiantes pueden disponer de más tiempo para aprender con calma. Asimismo, hacer prácticas de FP permite a los estudiantes establecer relaciones profesionales y establecer contactos que pueden ser valiosos para su carrera laboral.
Oportunidades laborales tras las prácticas de FP en verano
Tras finalizar las prácticas de FP en verano, los estudiantes tienen la oportunidad de acceder a nuevas oportunidades laborales. La Formación en Centros de Trabajo (FCT) permite a los estudiantes realizar prácticas en empresas u organismos, lo que puede ser un beneficio para el futuro profesional del alumno.
Además, el alumnado que cursa un itinerario de formación dual para la enseñanza secundaria obligatoria en un centro de formación para el empleo debe realizar la totalidad de la enseñanza secundaria obligatoria en dicho centro, lo que puede resultar ventajoso para su carrera laboral.
Las prácticas de FP tienen como objetivo fomentar el aprendizaje activo y mejorar las habilidades de los estudiantes a través de la experiencia laboral. Cuentan con la tutela personalizada del profesorado asignado y son obligatorias, ya que su calificación se incluye en la nota final del curso. En cambio, las FCT son voluntarias, pero pueden ser muy beneficiosas para el futuro de los estudiantes.
En resumen, hacer prácticas de FP en verano puede ser ventajoso para los estudiantes, ya que les permite adquirir experiencia laboral, mejorar habilidades y establecer contactos valiosos para su carrera laboral. Tras finalizar las prácticas de FP, se abre un abanico de oportunidades laborales para el alumnado.
¿Cómo puedo encontrar prácticas de FP en verano?
Encontrar prácticas de Formación Profesional (FP) en verano puede parecer un reto, pero existen opciones disponibles. La ley establece que el período de prácticas externas no puede superar el 10% del total de la duración del plan de estudios, pero algunas instituciones educativas permiten que este período aumente hasta el 15% si está justificado. Después de finalizar el curso, se dispone de un plazo de 3 meses para realizar las prácticas de FP. Es posible hacerlas en cualquier momento durante ese plazo, siempre y cuando se hayan terminado antes de que acabe el año académico.
Consejos para destacar en las prácticas de FP en verano
- Buscar prácticas en empresas o instituciones relacionadas con el campo de estudio.
- Demostrar motivación y compromiso desde el primer día de las prácticas.
- Establecer metas claras y definir un plan de acción para alcanzarlas.
- Pedir retroalimentación y comentarios constructivos al tutor o supervisor.
- Participar activamente en todas las actividades de la empresa.
Modalidades de prácticas de FP disponibles en verano
Entre las opciones disponibles para hacer prácticas de FP en verano se encuentran:
- La FCT en empresas u organismos, que se realiza en un horario compatible con la asistencia a clase en el centro educativo, y permite la adquisición de habilidades y conocimientos en el ámbito laboral.
- Las prácticas externas, que se enfocan en el desarrollo de habilidades técnicas y de relación en el ambiente laboral.
- Los proyectos y trabajos finales de carrera, que permiten a los estudiantes aplicar los conocimientos y habilidades adquiridos durante su formación en un proyecto real.
En resumen, las prácticas de FP en verano son una excelente oportunidad para los estudiantes de adquirir experiencia y habilidades en el mundo laboral. Con la flexibilización de las normativas debido a la pandemia, ahora existen más opciones disponibles para aprovechar al máximo las prácticas de FP.
En resumen, ¿se pueden hacer las prácticas de FP en verano? La respuesta es sí. Es importante tener en cuenta los requisitos necesarios y buscar oportunidades laborales que te ayudarán a destacar en el mercado laboral. Si estás interesado en saber más sobre cómo encontrar prácticas de FP en verano, las distintas modalidades disponibles o cómo destacar en ellas, no dudes en leer otros artículos en nuestro blog “Dime si se puede”. ¡Te esperamos!