La posibilidad de tener una Sociedad Limitada (S.L.) y trabajar por cuenta ajena es una opción cada vez más demandada por aquellos que buscan diversificar sus ingresos o compatibilizar diferentes actividades laborales. Sin embargo, puede resultar confuso saber cómo funciona este modelo empresarial y cuáles son las implicaciones legales y fiscales de compaginar ambas actividades. En este artículo, te presentamos todo lo que necesitas saber para poder tener una S.L. y trabajar por cuenta ajena. Desde los requisitos necesarios para constituir una S.L. hasta las diferencias con la figura del autónomo, pasando por las ventajas y desventajas de este modelo empresarial y cómo afecta la legislación laboral a los trabajadores que lo eligen. Acompáñanos en este completo recorrido por las posibilidades y restricciones de tener una S.L. y trabajar por cuenta ajena.
¿Qué es una S.L. y cómo funciona?
Sociedad Limitada (S.L.) – dividida en participaciones sociales – responsabilidad limitada de socios al capital aportado – gestión por sistema de gestión donde los socios toman decisiones y hay uno o varios administradores encargados de la gestión diaria.
Requisitos y trámites necesarios para constituir una S.L.
Estatutos de la sociedad – incluyen objeto social, capital social, número y valor de participaciones y forma de administración – elevados a escritura pública ante un notario – inscripción en el Registro Mercantil – desembolso mínimo de capital social – obtención de Número de Identificación Fiscal (NIF) – Alta en IAE y Seguridad Social y cumplimiento de obligaciones fiscales y laborales.
Ventajas y desventajas de tener una S.L.
Ventajas: limitación de responsabilidad personal, fácil de constituir, seguridad jurídica.
Desventajas: requiere mayor formalización y estructura organizativa que otros tipos de empresas, implica costes y obligaciones fiscales y contables más gravosos que otras formas jurídicas.
¿Es posible trabajar por cuenta ajena teniendo una S.L.?
Aspectos a tener en cuenta a la hora de compaginar ambas actividades
La respuesta es sí, es posible trabajar por cuenta ajena y tener una Sociedad Limitada (S.L.) al mismo tiempo. Aunque hay ciertos aspectos a tener en cuenta y ciertas limitaciones en cuanto a la actividad empresarial que se quiere desarrollar.
En primer lugar, hay que tener en cuenta el régimen de cotización a la Seguridad Social. Al ser pluriactivo, esto es, trabajar para otra empresa y darte de alta como autónomo, cotizas en dos regímenes de la Seguridad Social: el Régimen General mientras estás trabajando para otra empresa y el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos por darte de alta como autónomo. Es importante tener en cuenta que, si tienes un exceso de cotización a la Seguridad Social, te lo devolverá la Seguridad Social, especialmente con el nuevo sistema de cotización de los autónomos.
En segundo lugar, es recomendable aprovechar el salario fijo del trabajo por cuenta ajena para ahorrar e invertir en el nuevo negocio. Lo ideal es dejar el trabajo cuando los beneficios como autónomo sean suficientes y consolidados como para mantener la calidad de vida anterior.
En tercer lugar, es fundamental verificar el contrato laboral actual, ya que, en algunos casos, hay incompatibilidades para llevar a cabo la actividad empresarial que se está considerando. Si te das de alta como autónomo a la vez que trabajas por cuenta ajena, tienes derecho a la tarifa plana. Con el nuevo sistema de cotización de los autónomos, si trabajas a jornada completa, tendrás una bonificación del 50% durante los primeros 18 meses sobre la mitad de la base de cotización correspondiente según los tramos de ingresos.
Otra opción legal es crear una Sociedad Limitada (S.L.) mientras se trabaja por cuenta ajena. En este caso, es importante saber que el tipo de contrato que se tenga con la empresa puede limitar la capacidad del trabajador para tener su propio negocio. En la nueva empresa, se puede ser solo socio capitalista para evitar cotizar a la Seguridad Social o, si se desea, ser socio y empleado de la empresa. El alta en la Seguridad Social dependerá del porcentaje de participación en la empresa. Si la participación es menor al 33% del capital o menos del 25% siendo administrador, se debe cursar el alta en el Régimen General de pluriempleo. Si la participación es superior, se debe cursar el alta en el régimen de Autónomos en situación de pluriactividad.
En conclusión, es posible ser trabajador por cuenta ajena y tener una S.L. al mismo tiempo, pero es importante tener en cuenta las limitaciones y los requisitos necesarios para poder hacerlo legalmente. Es fundamental verificar si existe incompatibilidad en el contrato laboral actual y tener en cuenta las opciones de cotización a la Seguridad Social en ambas actividades. Si se tienen en cuenta estos aspectos, se puede compaginar ambas actividades de manera eficiente.
¿Cómo afecta la legislación laboral a los trabajadores por cuenta ajena con una S.L.?
Contratación de trabajadores, beneficios fiscales y régimen de cotización
Si estás trabajando por cuenta ajena y has decidido crear una empresa, como una Sociedad Limitada (SL), es importante que conozcas las implicaciones que la legislación laboral tiene en esta situación.
En primer lugar, es importante que verifiques si tu contrato laboral actual permite compaginar la actividad empresarial que estás considerando. En algunos casos, puede haber incompatibilidades que debes tener en cuenta.
En cuanto a los beneficios fiscales, si te das de alta como autónomo a la vez que trabajas por cuenta ajena, tienes derecho a solicitar la tarifa plana. Con el nuevo sistema de cotización de los autónomos, si trabajas a jornada completa, tendrás una bonificación del 50% durante los primeros 18 meses sobre la mitad de la base de cotización correspondiente según los tramos de ingresos.
Es recomendable aprovechar el salario fijo del trabajo por cuenta ajena para ahorrar e invertir en el nuevo negocio. La idea es no abandonar el trabajo actual hasta que los beneficios como autónomo sean suficientes y ya estén consolidados para mantener la calidad de vida anterior.
En cuanto al régimen de cotización, al ser pluriactivo, cotizas en dos regímenes de la Seguridad Social: el Régimen General mientras estás trabajando para otra empresa y el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos por darte de alta como autónomo. Si tienes un exceso de cotización a la Seguridad Social, podrás solicitar la devolución por parte de esta entidad.
Si decides crear una SL, tendrás la posibilidad de ser solo socio capitalista para evitar cotizar a la Seguridad Social o, si lo deseas, ser socio y empleado de la empresa. El alta en la Seguridad Social dependerá del porcentaje de participación en la empresa. Si la participación es menor al 33% del capital o menos del 25% siendo administrador, se debe realizar el alta en el Régimen General de pluriempleo. Si la participación es superior, se debe realizar el alta en el régimen de Autónomos en situación de pluriactividad.
Otra opción legal es ser autónomo, pero en régimen de pluriactividad. En este caso, los autónomos que se dan de alta en este régimen tendrán una base de cotización reducida del 50% de la base mínima durante los primeros 18 meses, y del 75% durante los siguientes 18 meses. Además, con la nueva ley de Autónomos, ya no tendrás que solicitar la devolución del exceso de cotización, sino que la propia Seguridad Social procederá a la devolución del 50% cuando se cotice por encima de 12.368,23 euros por contingencias comunes.
Es importante destacar que ser autónomo y trabajar por cuenta ajena al mismo tiempo puede ser más complicado, pero existen opciones para hacerlo de manera eficiente. En cualquier caso, es fundamental cumplir con los requisitos y procedimientos necesarios para llevar a cabo esta situación, sin saltarse ninguna obligación legal.
¿Cuáles son las diferencias entre ser autónomo y tener una S.L.?
Como trabajador autónomo, se paga una cuota mensual a la Seguridad Social. Los autónomos responden con su patrimonio personal de forma ilimitada, mientras que las SL tienen una responsabilidad limitada hasta el capital que han aportado sus socios. Los autónomos tributan a través del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Pero si eres trabajador por cuenta ajena, no tienes que preocuparte por estas cuotas ni por las responsabilidades. Tu empresa es la responsable de hacer las aportaciones necesarias a la Seguridad Social.
Formas de tributación
Los autónomos tienen la opción de acogerse al régimen de estimación directa simplificada o de módulos. Las empresas tienen que tributar a través del Impuesto de Sociedades y llevar una contabilidad más compleja y rigurosa.
Consideraciones para emprender mientras se trabaja por cuenta ajena
Es importante analizar la compatibilidad de las dos actividades y verificar el contrato laboral actual para ver si hay incompatibilidades. Es recomendable aprovechar el salario fijo del trabajo para ahorrar e invertir en el nuevo negocio. Si se decide ser autónomo, es posible compaginar ambas actividades en régimen de pluriactividad y obtener bonificaciones en la cuota de autónomos.
Si se elige la opción de la SL, es importante determinar el tipo de contratación que se tiene con la empresa actual y si se permite tener una participación en otra empresa. Además, se deben cumplir con los requisitos para el alta en la Seguridad Social según el porcentaje de participación en la empresa.
En conclusión, tanto ser autónomo como tener una SL ofrecen distintas posibilidades y restricciones para emprender mientras se trabaja por cuenta ajena. Es importante analizar las distintas opciones y elegir la que mejor se adapte a las necesidades y expectativas de cada persona.
En resumen, tener una S.L. es una opción muy atractiva para emprendedores que quieren limitar su responsabilidad y obtener beneficios fiscales. Sin embargo, si quieres trabajar por cuenta ajena al mismo tiempo, es importante tener en cuenta ciertos aspectos legales y de cotización, así como las diferencias entre ser autónomo y tener una S.L. Para más información sobre estos temas y otros relacionados con el mundo empresarial, no dudes en visitar mi blog Dime si se puede. En él encontrarás artículos y consejos útiles para emprendedores y autónomos. ¡Te espero!